Lluvioso se presentó el fin de semana, pero ante la agenda prevista los hermanos se adaptaron de maravilla. Rondaba el mediodía del sábado y el microbús de "Salomón Tours" conducido por nuestro hermano Manolín Carmona estacionó frente al cuartel. Tras la carga del personal y del líquido elemento recién escanciado de nuestras botas y el "agua dura" tan necesaria para el aliño de la sobremesa emprendimos rumbo a los Arenales. Nuestro hermano Manolo tenía todo listo y preparado para que disfrutaramos de una jornada apacible en la casa que con tanto empeño y trabajo ha edificado con su propio esfuerzo.
Por supuesto que cumplió con creces su objetivo habiéndonos brindado su hospitalidad y una mesa del agrado de los asistentes por lo que le quedamos eternamente agradecidos. En cuanto al rato y convivencia se pueden calificar con una palabra: SENSACIONALES. No pudo faltar el desfile, la Alondra o nuestras cuarteleras bien entonadas por Pepe Castilla. Hasta el "Chato" nos deleitó con unos solos de trompeta. ¡Eso sí! con su partitura claro. (Como se empeñe -conociendo su testarudez- el día menos pensado le saca un par de notas a la botella de Cruzcampo).
Al pasar por el Yacimiento de Fuente Álamo, el grupo de arqueólogos nos informó del hallazgo de una pieza arqueológica descatalogada y que nosotros identificamos de inmediato. Se trataba de
"El Rubio Joseillo"
desaparecido en combate y descubierto entre teselas y demás restos arqueológicos.
¡Toda una pieza de museo! como podeis ver:
Completamos la tarde entre una buena dosis de música y videos semananteros al calor de la chimenea empapados con un hermoso rosco de bizcocho que empapaba lo que le echaras. (Tuvimos que retirarle la botella de Machaco porque se bebía todo lo que se encontrara a menos de medio metro).
Para terminar nuestro polifacético David nos dió una lección magistral de como cazar y amaestrar un mono salvaje:
Llegada la hora plegamos y
¡MUCHACHOS UN POQUITO DE AGÜITA FRESCA, NENUCO Y P'AL CUARTEL!
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